lunes, agosto 16, 2004

Desde Kyoto (año 1, número 6)

Hola amigos !!!!

Como van las cosas por el Peru? Por aquí todas las noticias internacionales son sobre Iraq y las Olimpiadas, asi que mucho no se entera uno del Peru, excepto lo que encuentramos por Internet….. Por lo que veo Toledo ha subido algunos puntos de aceptación, pero creo que eso no implica que las cosas esten realmente mejor. En fin, cuentenme como se sienten las cosas alla, para tener una mejor idea.

Por aquí sigo sufriendo del calor kyotense. La temperatura llega a unos 33-34 grados unas 4-6 veces por semana. En Tokio (la capital) se rompio un record nacional al tener 40 dias seguidos con temperaturas de mas de 30 grados…. Eso es calor !!! (Y en Lima nos quejamos cuando llegamos a 27….)

Hace unas semanas presente un trabajo en una de mis clases de japones (Cultura Japonesa), sobre los Yakuza. Ustedes saben, la mafia japonesa. La gente en general no les tiene miedo, ya que “si no te metes con ellos, ellos no se meten contigo”. Algunos de ellos llevan tatuajes muy grandes (pero claro, con ropa no los puedes ver), y los que cometieron alguna falta al “reglamento yakuza” la pagan con la falta de uno o mas dedos de la mano derecha (comenzando por el menique). En este momento son unos 80,000 en todo Japon, y controlan muchos puertos (siempre hay mafias alli !!!), las industrias de la construccion (cuando no, construccion civil y la version local de su dirigente Mario Huaman), los negocios de venta de licor, bares y similares (que en japones se dice “negocios de las aguas” – ja!), los pachinkos (versiones locales de los tragamonedas), y los infaltables negocios del sexo…..

El jueves ayudamos (junto con otros companeros del Laboratorio) a un amigo a mudarse a Osaka (una ciudad muy cercana a Kyoto), donde va a continuar con sus experimentos. Por la noche nos fuimos a Hard Rock Café Osaka a comer y tomar unas cervezas, y luego nuestros amigos japoneses, deseosos de mostrarnos la ciudad, nos llevaron en el auto a un barrio “en el que hay mujeres muy bonitas, pero a las que no las pueden tocar, de acuerdo?” (sic). Es asi que terminamos (dentro del auto, y sin salir – OJO!), en el barrio rojo de Osaka…. Interesante experiencia!!! Son muchas pequenas calles, de viviendas pequenitas, en cuyas puertas se encontraban sentadas, a la usanza japonesa, unas simpaticas senoritas sonriendo a los parroquianos….. Al lado de ellas se encontraban sentadas, sonriendo y llamando a los clientes con la mano, las “mamis”. Solo habia una “senorita” y una “mami” por casa, por lo que parece que este es un negocio casi familiar. En las puertas habian letreros con la inscripción “para entrar necesitas tener mas de 18 anos”, y en algunas la tarifa (10,000 yenes o US$90 por 20 minutos !!!!). Todas las casas tenian un letrero de “prohibido tomar fotografias” (asi que no tengo ninguna amigos!!! No queriamos que nos saltasen yakuzas encima a destrozar el auto), y uno mas con la leyenda “por favor, use uno de los parqueos que hay cerca”….. Ustedes saben, para no molestar al vecindario. Jejeje!!! En fin, luego de dar varias vueltas por estas callejuelas, decidimos que nuestro tour habia concluido, asi que nos fuimos de alli….. o por lo menos lo intentamos. Giramos a la izquierda en una interseccion muy angosta, y nos encontramos en una callejuela muy delgada, con bicicletas a ambos lados, por la que teniamos que pasar si queriamos salir de alli. Nuestro “experimentado” chofer decidio que “retroceder nunca, rendirse jamas”, asi que nos aventuramos por la calleja de marras siendo mas o menos las 11:00pm. Como se iba haciendo cada vez mas angosto el paso, debido a las bicicletas estacionadas, tres de los pasajeros del auto bajamos para mover las bicis, lavadoras, sillas y demas, para poder pasar. Tratamos de no hacer ruido, pero no pudimos evitar despertar al vecindario, cosa que notabamos por el encendido progresivo de las luces de las casas…… Luego de mucho maniobrar, llegamos al extremo de la calle una media hora después (100 metros en media hora !!!), y nos percatamos (oh sorpresa!), que seria difícil (pero no imposible, según yo) que el carro diese la vuelta en esa esquina. En ese momento uno de los vecinos (despierto y ya en la calle), se nos acerco y dijo algo en japones….. ininteligible para estos pobres oidos latinos. Se fue con el conductor, que se puso livido (obvio, debido al rochesazo), y nos dijo que tendriamos que salir de la calle retrocediendo. Que!!! -Le dijimos- Pero nos ha tomado media hora llegar hasta aquí!!! Seguro que quieres retroceder??? –y si, pues el nino preferia salir retrocediendo por donde habiamos venido. Asi que nuevamente nos pusimos en marcha, esta vez con ayuda de muchos otros vecinos, quienes tambien habian salido ya a la calle. Inclusive una senora en la casa de la esquina salio a ver que pasaba….. En fin, acortemos la historia y pasemos una media hora mas en que logramos salir de la calle en mencion (siempre de retroceso), y nos encontramos alli con las instrucciones, dadas por los mismos vecinos, sobre como salir del barrio. Hasta alli ya estaba lleno de vergüenza, disculpandome con todos los japoneses que veia, inclinandome cual cuasimodo hacia el frente, y diciendo (en japones) “lo siento mucho, lo siento mucho”. Asi que subimos al auto, donde nuestro (inefable) chofer nos comento “lo que el senor me dijo es que en la casa de la esquina vive un yakuza, y que lo mejor era salir de retroceso para no molestarlo, y que los vecinos nos ayudarian, pero que si intentabamos tratar de seguir de frente, era a nuestro propio riesgo, y los vecinos ya no nos ayudarian, sino que se meterian en sus casas y apagarian las luces…..” GLUP !!!!! Salgamos corriendo de aquí……!!!!! Seguimos las instrucciones que nos dieron, y pronto nos encontramos en la via rapida, alejandonos de la zona, pero mirando cada 10 segundos hacia atrás para asegurarnos que ningun auto con lunas polarizadas nos estuviese siguiendo……. La adrenalina se mantuvo alta hasta que llegamos a la casa de uno de los japoneses (que vivia en esa ciudad), y nos pusimos a respirar hondo…...

Esa fue mi experiencia del mes y, por ahora, me mantendre alejado de cualquier negocio que pueda tener alguna relacion con los yakuzas….. No es que haya estado muy cerca de tener un menique cercenado ni nada parecido pero……ustedes saben, por si las moscas……

Un abrazo a todos y ya nos estamos comunicando,

Vuestro (yakuzo) amigo,
Giancarlo.